España tiene el mismo paro que en 2009 pero gasta la mitad en prestaciones

El Gobierno prevé dedicar a prestaciones por desempleo el 1,5% del PIB, lo que se traduciría en unos 17.500 millones de euros, según aparece en el plan presupuestario actualizado la semana pasada. Sería la cifra más baja desde el año 2007, con una reducción del 11% respecto al presupuesto de este año.

Estos 17.500 millones de euros previstos deberían bastar para cubrir las prestaciones de los desempleados españoles. El Gobierno prevé una rebaja de la tasa de paro de dos puntos, lo que se traduciría en una media del 17,6% de la población activa. Este nivel de desempleo sería el mismo que el existente en el año 2009, sólo que entonces el Estado gastó más de 31.000 millones en prestaciones.

Es decir, en 2017, España tendrá un nivel de paro muy parecido al del ejercicio 2009, pero dedicará un 45% menos a pagar prestaciones que entonces, debido a que el gasto en prestaciones se está reduciendo mucho más rápido de lo que baja el nivel de desempleo en España.

El gasto cae a mínimos, con casi el doble de paro

Otro ejemplo. El gasto en paro será en 2017 el más bajo desde el ejercicio 2007. Los datos de Hacienda indican que será unos 2.000 millones de euros mayor que entonces, pero con una gran diferencia: la tasa de paro de 2017 será casi el doble que la que se registraba diez años antes (17,6% previsto en 2017 frente al 8,23% que se registró en 2007).

El gasto en prestaciones alcanzó su nivel más alto en 2010, cuando el Estado necesitó 32.237 millones de euros para pagar a todos los desempleados. Sin embargo, la tasa de paro récord no llegó en 2010 sino tres años más tarde, ya que la media de 2013 estuvo por encima del 26%. No obstante, cuando el paro alcanzó su pico, el gasto ya había descendido hasta los 29.805 millones de euros.

Esto se debe en gran medida al paro de larga duración, que hace que los desempleados que agoten sus prestaciones contributivas sin haber encontrado un nuevo empleo, pero también a los recortes en la prestación que aprobó el Gobierno en 2012. Desde el verano de 2012, el Ejecutivo redujo del 60% al 50% de la base reguladora el importe máximo de la prestación por desempleo a partir del séptimo mes de percepción de esta prestación.

Todo ello ha hecho que el gasto en desempleo baje en más de 10.000 millones de euros desde 2013 hasta este ejercicio, a pesar de que el paro siga muy cerca del 20%. De hecho, la previsión del Gobierno es que este 2016 sea el primer año con una tasa de paro por debajo del 20% desde 2010.

eleconomista.es/

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